Angola en 1980
Traducción en inglés: Angola in 1980
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Angola en 1980: Enfrentamiento con UNITA y con Sudáfrica
En 1980, el presidente del país siguió su lucha contra UNITA. A partir de 1975 Angola fue un importante punto caliente de la Guerra Fría, con Estados Unidos (EEUU), la Unión Soviética, Cuba y Sudáfrica implicados allí de diferentes maneras.2 En cuanto a las intervenciones sudafricanas en Angola de 1975 a 1988, ahora disponemos de muchos relatos detallados de las batallas libradas por las Fuerzas de Defensa Sudafricanas (SADF) en Angola, desde la Operación Savannah a finales de 1975 hasta la Operación Reno en mayo de 1978, y las numerosas operaciones que siguieron a partir de 1980, de las cuales las Operaciones Protea en 1981 y Askari en 1983-4 fueron las más importantes antes de las que tuvieron lugar en torno a Cuito Cuanavale en 1987-8.
junto a la agresión militar sudafricana y la demonización del gobierno angoleño como cliente soviético, tuvieron lugar una serie de conversaciones entre funcionarios de ambos gobiernos. Mientras Sudáfrica adoptaba una postura muy agresiva y de confrontación hacia Angola en público, se celebraron reuniones bilaterales entre funcionarios sudafricanos y angoleños. La mayoría de ellas fueron altamente secretas, y ninguno de los implicados ha escrito sobre ellas. Sólo la apertura relativamente reciente de los expedientes pertinentes en los archivos del Departamento de Relaciones Internacionales y Cooperación de Pretoria permite ahora contar al menos parte de esta historia, y cómo se relaciona con la de la Guerra Fría en la región.
Que hubiera habido tales contactos entre los dos países resulta a primera vista muy sorprendente. Cuando nació la Angola independiente, en noviembre de 1975, las fuerzas sudafricanas se encontraban no muy lejos de Luanda, con la misión de ayudar a impedir que el Movimiento Popular para la Liberación de Angola (MPLA) se hiciera con el poder. Habiendo fracasado en esa misión, como consecuencia de la llegada de una gran fuerza militar cubana a Angola, las fuerzas sudafricanas se retiraron a finales de marzo de 1976. Sin embargo, Sudáfrica permaneció en un estado de guerra virtual, aunque no declarado, con Angola durante la siguiente década y más, entrenando fuerzas para derrocar a su gobierno, prestando ayuda masiva a la rebelde Unión para la Independencia Total de Angola (UNITA) e invadiendo a menudo el país, sobre todo desde el norte de Namibia, pero a veces desde la propia Sudáfrica. Angola condenó repetidamente las intenciones altamente agresivas de Sudáfrica hacia ella. A su vez, Sudáfrica acusó repetidamente a Angola de proporcionar bases desde las que la Organización Popular del África Sudoccidental (SWAPO), el único movimiento de liberación namibio que libraba una lucha armada contra Sudáfrica, y de ayudar activamente a la SWAPO a enviar guerrilleros a Namibia. A partir de 1976, Angola albergó también las principales bases de entrenamiento militar de Umkhonto we Sizwe (MK), el brazo armado del Congreso Nacional Africano (CNA).
Con Sudáfrica ocupando entonces Namibia, la frontera entre el norte de Namibia y el sur de Angola separaba un país que estaba bajo el dominio sudafricano y del apartheid, y desde el que las fuerzas sudafricanas operaban en Angola, de otro que se enorgullecía de ser marxista-leninista y revolucionario, albergaba fuerzas armadas de movimientos dedicados a derrocar el dominio sudafricano tanto en Namibia como en Sudáfrica, junto con tropas cubanas, y mantenía estrechas relaciones con la Unión Soviética.
Reuniones iniciales
La primera reunión de funcionarios de ambas partes tuvo lugar sólo un mes después de que las últimas tropas sudafricanas abandonaran Angola y, por tanto, sólo unos meses después de que los sudafricanos se hubieran enzarzado en una guerra no declarada para impedir que el MPLA llegara al poder. Como hemos visto, había existido una larga historia de apoyo sudafricano al régimen colonial que el MPLA había combatido durante quince años. Al igual que en las conversaciones que los funcionarios sudafricanos mantuvieron con sus homólogos mozambiqueños poco después de que el FRELIMO llegara al poder en ese país, había cierto pragmatismo por parte sudafricana, un reconocimiento de que, por muy aborrecible ideológicamente que fuera el nuevo gobierno de la antigua colonia portuguesa, el movimiento de liberación había tomado el poder y, por lo tanto, había que ocuparse de él. A la mayoría de las ocho reuniones celebradas entre abril de 1976 y junio de 1980, todas ellas en Ruacana, en la frontera entre Angola y Namibia, o en alguna de las ciudades del sur de Angola, asistieron funcionarios sudafricanos y angoleños de nivel relativamente bajo, pero la figura más destacada del lado angoleño, el joven Manuel Alexandre “Kito” Rodriques, iba a adquirir cada vez más importancia en la política angoleña, y era el funcionario angoleño al que los sudafricanos iban a conocer mejor. La única persona de ambos bandos que iba a asistir a esas reuniones durante casi una década, por lo que no fue del todo sorprendente que se convirtiera en el primer embajador de Angola en Sudáfrica tras el traspaso de poder en 1994.
Los principales asuntos tratados en las reuniones de 1976 y 1977 fueron de carácter práctico, relacionados con la reducción de la tensión a lo largo de la frontera, mediante la creación de una zona desmilitarizada a ambos lados de la misma y la organización de vuelos conjuntos sobre ella en helicópteros. Poco salió de las sugerencias ofrecidas en estas reuniones. Rodriques dejó claro que ningún soldado angoleño se aventuraría a cruzar la frontera y acusó a los sudafricanos de violar constantemente el espacio aéreo angoleño y de prestar apoyo a UNITA.
Para los sudafricanos, la cuestión más importante era el plan Calueque/Ruacana, que, como hemos observado, beneficiaba principalmente a la Namibia ocupada por Sudáfrica. Los sudafricanos necesitaban la cooperación angoleña porque las presas que suministraban agua al plan hidroeléctrico estaban en Angola y querían terminar la construcción en Calueque. Los angoleños respondieron que la cuestión de la presa no podía considerarse separadamente de las cuestiones políticas y militares, y que no podía haber cooperación con Sudáfrica hasta que cesaran los actos de agresión desde el lado namibio de la frontera. Citaron la acumulación de tropas sudafricanas en bases en Ovamboland y en Caprivi, y el entrenamiento por parte de los sudafricanos de lo que denominaron “fuerzas títere”, es decir, UNITA. Los angoleños también censuraron la propaganda belicosa contra el MPLA que emanaba de Sudáfrica.
Los angoleños no sólo se negaron a permitir que continuara la construcción de la presa de Calueque, sino que en 1977 cerraron las compuertas de la presa, inutilizando prácticamente el proyecto hidroeléctrico. Como consecuencia, los sudafricanos tuvieron que ampliar la central eléctrica de Van Eck, alimentada con carbón, en la capital de Namibia, Windhoek. En una reunión con funcionarios sudafricanos celebrada en Mocamedes, en el sur de Angola, el 1 de marzo de 1978, en un breve momento de optimismo sobre las perspectivas de un acuerdo con Namibia basado en el plan de compromiso propuesto por el Grupo de Contacto Occidental, Rodriques dijo que los angoleños pensaban que la disputa sobre el plan se resolvería con el advenimiento de un nuevo gobierno independiente de Namibia con el que podrían cooperar. Pero aunque las negociaciones llevadas a cabo por el Grupo de Contacto Occidental con Sudáfrica y la SWAPO condujeron a la aprobación de la Resolución 435 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) en septiembre de 1978, que incorporaba el esquema de la ONU para la transición a la independencia de Namibia, para cuando los funcionarios sudafricanos y angoleños se reunieron el 10 de noviembre de ese año, la perspectiva de que Namibia pasara a la independencia en un futuro próximo parecía mucho menos probable. Para entonces, el gobierno sudafricano había dejado claro que no estaba dispuesto a permitir que la ONU aplicara la resolución 435 tal y como se proponía. En mayo de 1978, las Fuerzas de Defensa Sudafricanas (SADF) habían realizado una incursión en el sur de Angola para atacar el campamento de la SWAPO en Cassinga. En la reunión de noviembre, se volvió a decir a los sudafricanos que, aunque Angola estaba a favor de completar el proyecto de Ruacana/Calueque, la construcción sólo podría continuar si Sudáfrica dejaba de ayudar a la UNITA. Así que no se avanzó. (En 1980, las Naciones Unidas también censuraron a Sudáfrica, por agresión, por el raid que hizo con 3.000 soldados contra Angola).
En la reunión celebrada en Ngiva, en el sur de Angola, el 2 de septiembre de 1978, se trató un nuevo asunto: el encarcelamiento del zapador Johan van der Mescht, un soldado blanco sudafricano que había sido capturado por la SWAPO en el norte de Namibia en febrero de ese año y que estaba encarcelado en la capital angoleña, Luanda. Durante algunos años fue objeto de las investigaciones sudafricanas en las reuniones que celebraban con los angoleños. Los funcionarios angoleños le consideraban un prisionero de guerra de la SWAPO y en repetidas ocasiones instaron a los sudafricanos a reunirse con la SWAPO para hablar de él y de otros asuntos. El gobierno sudafricano nunca estuvo dispuesto a hacerlo, alegando que esto se vería como un reconocimiento de la lucha armada de la SWAPO. Van der Mescht languideció en la cárcel hasta que finalmente fue liberado en un canje de prisioneros en el Checkpoint Charlie de Berlín en mayo de 1982. Al anunciar su liberación, el Primer Ministro P.W. Botha dijo que el canje era una prueba de la “contribución activa de Sudáfrica a la lucha por la supervivencia del Mundo Libre contra la dominación comunista”.
La década de 1970 terminó sin que las reuniones entre funcionarios de los dos países hubieran conseguido algo más que limar algunas cuestiones relativas al patrullaje en la zona fronteriza. Brand Fourie, el principal funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores sudafricano, estuvo presente en la reunión de febrero de 1979 en Ruacana, en la que el ambiente se describió como “amistoso” y en la que se pidió a los sudafricanos una lista de los productos que podían enviar a Angola. Pero en octubre de ese año las Fuerzas Aéreas sudafricanas atacaron Lubango, en el sur de Angola, con el objetivo de alcanzar el cuartel general de la SWAPO en sus afueras, pero destruyendo una fábrica de muebles en el proceso.
Después de eso la actitud angoleña se endureció. En un telegrama abrupto, Rodriques le dijo a Fourie que podrían celebrar otra reunión en Ruacana pero que sólo se podría hablar de la presa. Cuando el equipo sudafricano acudió allí a principios de febrero de 1980, los angoleños no se presentaron, quizá en parte debido a los comentarios de Pik Botha a la South African Broadcasting Corporation, en vísperas de la reunión propuesta, de que Angola (y Zambia y Mozambique) no debían escuchar “los consejos de los imperialistas rusos y de los militantes poco realistas de África” ni mirar “hacia el Kremlin y sus secuaces cubanos y de Europa del Este en busca de salvación… “.
Principios de la década de 1980
A pesar de ello, y de una serie de nuevas incursiones lanzadas por las SADF en Angola para intentar impedir las incursiones de la SWAPO en el norte de Namibia, en junio de 1980 se celebró otra reunión entre funcionarios de los dos países, ahora por primera vez en la Ilha da Sal, en Cabo Verde, frente a la costa de África Occidental. South African Airways, que tenía prohibido sobrevolar el continente africano, hacía ahora escala en la isla de Sal en ruta hacia Europa y América, y el dinero que Cabo Verde obtenía de Sudáfrica por las escalas era una importante fuente de ingresos para el empobrecido archipiélago. Sal era un buen lugar de encuentro porque a los sudafricanos les resultaba relativamente fácil volar hasta allí, y Cabo Verde mantenía estrechos lazos con Angola porque ambos eran miembros de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa. Hay que recordar que el gobierno sudafricano estaba muy aislado internacionalmente a finales de los años 70, después de que los esperados vínculos con los gobiernos del África negra durante el mandato de John Vorster no se hubieran materializado. La apertura de conversaciones serias con Angola sobre Cabo Verde parecía un avance potencial hacia el compromiso con el África negra de forma más general.
En la reunión de junio de 1980, el equipo angoleño dirigido por Rodriques incluía a altos cargos del ejército angoleño, mientras que el equipo sudafricano dirigido por Fourie incluía a Pieter van der Westhuizen, jefe de la inteligencia militar, y al general Magnus Malan, entonces director general de Defensa. Rodriques declaró que Angola no estaba influenciada por Cuba ni por la Unión Soviética y que quería resolver los problemas mediante el diálogo, no la violencia. La SWAPO, dijo, estaba dispuesta a hablar con Sudáfrica y con los partidos internos de Namibia, y Angola facilitaría esa reunión. Sugirió que un equipo de expertos se reuniera para tratar la cuestión de Ruacana/Calueque. Fourie respondió diciendo que tendría que consultar a su gobierno, pero prometió una respuesta relativamente rápida. Antes de que pudiera entregarse, se produjo otra incursión militar sudafricana en Angola, tras la cual no hubo más avances. La negación de Fourie en la reunión de junio de 1980 de que la UNITA estuviera recibiendo apoyo desde dentro de Namibia era engañosa, ya que los sudafricanos, principalmente en las SADF, estaban tratando directamente con Jonas Savimbi y dándole los medios para mantener su lucha contra el MPLA. Cuando se reunió con el ministro de Estado de Mozambique en París, en diciembre de 1980, Fourie aún albergaba esperanzas de estrechar lazos con Angola, pues habló de la posibilidad de que Sudáfrica comprara petróleo a ese país y le vendiera maíz, y preguntó si, si Sudáfrica dejaba de ayudar a Savimbi, Angola podría acceder a poner fin a su ayuda a la SWAPO.
Revisor de hechos: Mix
Informe de País en Relaciones Internacionales: Angola en 1980
- Denominación oficial en español (nombre protocolario): República de Angola
- Código País según ISO y según la UE de Angola (véase)
- Sigla del País (COW): ANG
- Región a la que pertenece el Código de País: África Subtropical ( África )
- Relevancia política del País (“correlates of war major power status”) en este año: 0
[Nota: las operacionalizaciones populares de la relevancia política -incluyendo la clasificación de “Correlatos de Guerra”– tratan a todos los Estados (incluyendo a Angola en 1980) como si tuvieran igual estatus y, consecuentemente, como si estuvieran igualmente predispuestos hacia varios comportamientos e interacciones políticas. Los estados son políticamente relevantes si muestran rasgos que elevan la probabilidad de base de ser parte activa en algún comportamiento geopolítico de interés y, especialmente, de conflicto].
Capacidad (puntuación COW CINC): Angola en 1980
El Índice compuesto de capacidad nacional (CINC) se basa en los siguientes componentes: población total, población urbana, producción de hierro y acero, consumo de energía, personal militar y gasto militar. Utiliza un promedio de porcentajes de los totales mundiales en esas seis variables.
- COW puntuación CINC: 0.001024
- Componente de capacidad: Puntuación del personal militar: 47
- Componente de capacidad: Puntuación de los gastos militares: 682543
- Componente de capacidad: Puntuación de producción de energía: 9030.39
- Componente de capacidad: Puntuación de la producción de hierro y acero: 10
- Componente de capacidad: Puntuación de la población urbana nominal: 899
- Componente de capacidad: Puntuación nominal de la población total: 7019
Variable de alianzas y patrones de alianza: Angola en 1980
- Tau-b con líder del sistema (subsistema regional o sistema global): -0.140752
- S ponderada o no ponderada con líder del sistema (subsistema regional o sistema global): 0.333333
Para información al respecto, ver datos de la Cartera de la Alianza.
Variables del Componente de Capacidad: Angola en 1980
- Democracia: 0
- Autocracia: 7
- Regulación sobre reclutamiento de los miembros del poder ejecutivo del país: 2
Para información sobre esto, ver serie de datos de Polity.
Variables de los componentes de Polity IV
El conjunto de datos de Polity IV incluye una serie de variables institucionales (escala ordinal). Estas variables se han utilizado típicamente para medir el grado de autocracia y democracia, así como los pasos institucionales entre ambos (“anocracia”), en Angola en 1980 y otros países y períodos. El valor de autocracia restado del valor de democracia da la “puntuación de la política” de -10 (fuertemente autocrático) a 10 (fuertemente democrático). La lista variable de instituciones resultante es el resultado de una operacionalización pragmática. Polity IV es el conjunto de datos más impresionante de instituciones políticas desde un punto de vista exploratorio.
Las instituciones que mide el conjunto de datos de Polity IV (respecto de Angola en 1980 y otros países y períodos) son, en primer lugar, tres variables de selección o elección de los miembros del poder ejecutivo del país: 1) la regulación de la selección o elección del jefe del ejecutivo del país, 2) la competitividad de la selección o elección de los miembros del ejecutivo del país y 3) la apertura de la selección o elección de los miembros del ejecutivo del país; en segundo lugar, una variable sobre la independencia de la autoridad ejecutiva: 4) las limitaciones del ejecutivo (normas de decisión); y, en tercer lugar, dos variables sobre la competencia y la oposición políticas: 5) la regulación de la participación, y 6) la competitividad de la participación.
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